Mi Enamorado Corazón: febrero 2017

CUANDO EL INVIERNO HA CAÍDO -SONETO-De Valentín Romeo V.

SONETO

De pronto invierno gris en mí ha caído;

jamás vendrá radiante primavera.

En casa, gran silencio que me espera,

y grande y solitario está mi nido.

Ahora, cuando no ando tan erguido

ni fuerte, tan jovial como antes era:

tan sólo soy la sombra del que fuera…

me da la vida cruel, su gran olvido.

Platico solo con la noche fría,

vivencias locas que mi mente apaña…

recuerdos de la vida que tenía.

Ahora, cuando el mundo no me extraña,

la vida me parece más sombría...

vivir… soñar... ¡es todo gran hazaña..!

VIVO YO ENTRE RIMAS Y VERSOS -De Valentín Romeo V.

Vivo yo entre rimas y versos,

entre mil recuerdos dispersos;
plasmo en cada verso el dolor:
verso a verso va mi clamor.

Nada bueno viene mañana:

yo entre rimas... tú tan lejana,
yo entre versos... tú enamorada,
yo entre letras... tú acompañada.

Vierto mi alma en tristes poemas.

Mas rogarte, ¡nunca!, no temas:
¡Muera yo en mis versos, tan preso...
antes de implorar tu regreso!...

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ME DA UN BESO LA NOCHE… Soneto de Valentín Romeo

Me da un beso la noche... pero no lo disfruto.
Me acarician estrellas... más ya no me ilusiona.
Una lágrima triste, de pronto me traiciona;
y se me va la vida...sin tï… otro minuto.

Me alumbra bien la luna... pero sigo de luto.

Me consiente la brisa... pero no me emociona.
Si tú no estás conmigo, mi alma jamás reacciona:
mucho dolor en mí... y dolor absoluto.

Sentado con la noche, yo le pregunto tanto:

¿por qué, mi soledad; por qué, mi gran tristeza;
por qué, tanto dolor; por qué, mi triste llanto..?

Para no herirme dice, con gran delicadeza,

arropándome tierna, con su fiel, negro manto:
"el amor es así...", y de nuevo, me besa...

VOZ DEL SILENCIO... QUE NADA ME DICE. Valentín Romeo V.

VOZ DEL SILENCIO... QUE NADA ME DICE
Valentín Romeo V.

Voz del silencio… que nada me dice,

algo que logre el dolor me suavice;
sólo mi voz en la nada se pierde,
grande tristeza, rabiosa, me muerde.

Esas miradas que fueron mi vida,

lejos se fueron y muero, querida;
seco desierto sin ti, mi camino...
lóbrega noche, sin ti, mi destino.

Falta tu mano evitando caídas...
Faltan tus besos que sanan heridas.
Faltan tus ojos en donde mirarme.
Falta tu risa que puede alegrarme.

Triste sin ella, a vivir yo me obligo.
Tú, soledad, de la mano conmigo;
siempre contigo comparto mi mesa,
dime, pregunto: si pronto regresa…