¿Debo
seguir escribiendo poemas?
O
a veces, dormido, viene a mi mente un verso; lo garabateo en mi fiel cuaderno dormido
junto a mi cama; y al día siguiente, al leerlo, digo: ¿Cómo dejar de escribir,
si hasta dormido lo hago..?
Si
la misma duda viene a ti, pregúntate: ¿te gusta escribir, te gusta lo que
escribes, te gusta lo que haces? Si la respuesta es sí, adelante, sigue; que
nada te detenga: conque a ti te guste lo que haces, ya tienes bastante...
¡Adelante!
No hay comentarios:
Publicar un comentario